La prueba central del jueves en el Bosque enfrentó a yeguas de 3 años y más edad en recorrido de 1.400 metros, llevándose a casa la dorada la descendiente de Angiolo, que una vez más ratificó su plena adaptación a la Ciudad de las Diagonales para cosechar un nuevo éxito.

La conducida por Juan Cruz Villagra salió con intención de estar en el fuego de la situación, pero su docilidad le permitió al piloto controlar esa velocidad inicial para guardarle potencial para la definición.

Manteniéndose por líneas internas con mucha proximidad a la vanguardia, esperó el momento oportuno para escabullirse y emplear su carga en el tramo decisivo, apoderándose del liderazgo al promediar los 150 finales, manteniéndose con firmeza hasta el espejo.

En 1’23”64c, la pensionista de Miguel Cafere se retrató triunfal por quinta vez en 13 intentos, y ya lo hemos dicho en oportunidades anteriores: ¡Cómo rinde!