Faltar a la palabra parece mucho más grave que ganar más o menos carreras.

“Es el administrador... es Lotería... es el ministro... es el gobernador”... todos van un escalón más arriba en la cadena de responsabilidades para deslindar su parte pero las soluciones nunca aparecen.

La interna política de la coalición de gobierno tiene en la lotería provincial uno de sus campos de batalla.

El loteo de cargos en su estructura provoca todo tipo de trabas y una constante puja para ver quién y cómo puede apoderarse de alguna porción de lo que está dando vueltas 

En consecuencia es lógico que no haya interés político por ocuparse de la situación del hipódromo. Cuando se puede se gira la plata correspondiente por ley para pagar los premios, se depositan los sueldos y lo demás... vaya a saber uno donde queda.

Durante el martes y el miércoles hubo una serie de reuniones para que “aparezca la plata”... y la plata no apareció y entonces el hipódromo no está en condiciones de funcionar.

Luego de una de esas reuniones circularon versiones inquietantes; 

tan inquietantes que preferimos entrar en la etapa de la “negación” 

como sería en psicología.

Al no confeccionarse los programas nuestra publicación se ve resentida. Intentamos por todos los medios esperar hasta última hora la solución del conflicto para ofrecer nuestra edición completa pero ante la falta de certezas decidimos publicar los programas de Palermo y San Isidro y Tandil.

Insistimos en que la situación del Hipódromo de La Plata excede a los profesionales del sur. Es necesario que se involucren todos los sectores de la actividad para rescatar al escenario sureño.

Todas las semanas nos encontramos con algún problema... y por ahora son administrativos...

Nos queda rogar cada día que no se produzca una tragedia que lleve a la actividad a los medios masivos, se ventile todo lo que internamente conocemos y las consecuencias sean aún mayores.