La yegua presentada por Manuel Dussol (en realidad entrenada por Gerardo Alteño) asumió el liderazgo desde el vamos y su jinete William Pereyra manejó el trámite de carrera a su antojo; incluso corriendo con varios cuerpos a favor una buena parte del recorrido sobre un césped muy alto y bastante raleado en varias partes. De los parciales, mejor ni hablar. Cada vez son más increíbles y no vale la pena entrar en discusiones por un sistema de medición que, se sabe, no es certero y termina distorsionando los resultados de las competencias.

Framea ingresó en la recta en ganancia, Pereyra la llevó hacia media cancha, el mejor sector para transitar, y de ahí al disco la representante del stud La Vaca controló la persecución de Carta De Amor, rival a la que en definitiva terminó venciendo por 1 1/2 cuerpo. 

Con la receta que mejor resultados le dio hasta aquí, Framea consiguió una conquista jerárquica de valor, sobre todo por la categoría de la rival a la que venció. De ahora en más la hija de Cafrune deberá demostrar hasta dónde es capaz de llegar.