El Clásico Old Man (G3-1400 metros) terminó siendo un mano a mano  entre Beauty Sea (Seahenge) y Oasis Boy (Asiatic Boy), que le brindaron un epílogo sensacional a la última competencia jerárquica del domingo palermitano.

La carrera se hizo ligera desde el vamos, como lo expresa el registro final de 1’21”63/100, algo más de un segundo menos que el empleado por las potrancas en el Manuel J. Güiraldes (G3). Pero lo mejor se vio en los 300 finales, cuando el vencedor fue en busca del hasta ahí invicto. Y en el cabeceo prevaleció el conducido por Eduardo Ortega Pavón.

“Lo ligué, ya que en un principio lo iba a correr Goncalves que no pudo hacerlo por la suspensión. No lo había montado nunca, pero, más allá de un problemita que dio al entrar a gateras, me pareció un potrillo muy manso”, señaló el jinete vencedor.

Y agregó: “En carrera vino cómodo y lo moví un poco para ponerlo segundo e ir a buscar al de adelante que se resistió y se puso duro. Por suerte se nos dio en el cabeceo. Creo que es un buen elemento que va a ir creciendo a medida que aumenten las distancias”.

Segunda victoria en tres entregas para el potrillo de la caballeriza El Carmen, que fue criado en el Haras Vacación y es entrenado por Nicolás Martín Ferro, quien se dio el gusto de emular a su padre, que había ganado el clásico gemelo pero para potrancas.

Sigue en plena evolución el potrillo, que llegó corriendo, como para esperar que, como dijo su jockey, mejore aún más a medida que las distancias se alarguen.