William Pereyra lo trajo tercero desde el vamos, mientras que los ligeros Orpen Full y Emblem Three dieron rienda suelta a su pique inicial. Pero por los 400 el jinete llamó a la realidad al pupilo del joven entrenador Alan Buxmann, el zaino colorado arrancó como si recién largara, asumió el liderazgo y no lo abandonó hasta cruzar la meta con 1 cuerpo de ventaja sobre Unity, que entró con mucha fuerza por dentro pero en el final fue neutralizado sin problemas por el ganador.

Sumó el triunfo jerárquico más importante de su campaña Noguchi y ratificó su intención de ganar un lugar entre los velocistas que disputan las carreras más importantes de la velocidad. Un objetivo seductor tras la partida de Strategos, "el emperador de la recta", hacia otras empresas.